30.4.06

Dolce far niente


Que ganas, pero qué ganas de estar así, sin hacer nada de nada... un día... nada....pero de nada...

27.4.06

Herencia


Antes de tener hijos, mucho antes, tuve sobrinos. Tenía 7 años, apenas uno más que mi hija ahora, mientras yo veía Titanes en el Ring en Atenas o Juniors (les juro, es verdad) nacía mi sobrino Martín. Y les puedo asegurar que, desde entonces, me cambió el panorama. Criada en una familia de “grandes”, la llegada de un bebé, del primero que vería en mi vida, era fantástico. Y así fueron llegando ellos: Vero, Alito, luego floreció otro árbol: Ivana, Gabi, Juanchi. Me acuerdo con detalles el momento de enterarme de cada nacimiento, el instante de conocerlos y de mirarles las manos... Esas manos tibias, esos dedos gorditos, panzones, esas puntas redondeadas, bueno, si ven alguien con manos así, tal vez están en frente de alguno de ellos. Sólo hay una a salvo, con diez dedos largos y flacos (también con un manojo de palabras) como dice Fito. Pero el resto, lleva el identikit de mis manos. Y de mi corazón, y de la primera impresión de lo que es el amor absoluto por alguien que ves nacer, crecer y ahora transitar casi las mismas baldosas que yo. Pero no se olviden, eh? En estos momentos siguen esos pasos dos pares de manos de idénticas características, las de mis pequeños.

25.4.06

Recuerdos... vacaciones invierno 05


Yo, madre argentina, trabajo, mi marido, padre argentino, es docente. Tiene vacaciones de invierno, yo no… pero como la envidia es mucha… sacrifiqué una semanita del verano para este julio frío y desconsiderado. Mi niña tiene vacas también (5 añitos, jardín de infantes) el bebuchón (21 meses) no, que se embrome por bebé, pobrecito y va a la guarde…
Entonces ¿cuáles fueron los planes? Disfrutar a full con los chicos, dedicarles ese tiempo tan ansiado y mezquino del resto del año, dormir hasta más tarde, caminar y cumplir mi dieta, tejer que me encanta y terminar algunos trabajos pendientes, leer. Pero… ¿que hice hasta ahora? Caminar atrás de ellos, cumplir mi dieta a fuerza de obstinación aún cocinando manjares a pedido de los “vacacionantes”, leer toda programación de títeres que se me cruza, terminar la preciada bufanda fucsia de mi hija para no seguir escuchando sus reclamos y su promesa de piquete y convertirme, en una esclava, esta vez no de mi jefe sino de mi familia, una rehén en mi casa, un taxi cuyos pasajeros son los abrigos que nadie quiere llevar y un ansiolítico sin receta para los apuros de los ansiosos que me rodean…
Mamá, ¿cuantos días hay que dormir para ir al teatro a verlo al Negro Rada? Pregunta mi tesorito… Dos, mi amor, respondo. Al rato… mami, ¿es hoy que vamos al teatro? ¿No te dije que faltan dos días??? Pregunto yo… y me pregunto…¿ porque los chicos, que cada vez vienen más locuaces y astutos, no vendrán desde bebés con nociones de tiempo, matemáticas y adverbios de lugar?
Fuimos al teatro el domingo y empezó nuestra pieza: ¿mamá, cuando empieza la obra??? Empezó la obra. Mamá, ¿falta mucho para que termine? Terminó la obra. Y ahora ¿adonde vamos? Fuimos a comer sándwiches (ellos, yo una barrita de cereal sabor telgopor…) Seguimos…¿cuánto falta para ir al teatro a ver al Negro Rada???
Hoy fuimos a ver títeres… aburridísimos… El bebé estaba colgado a mí como Chita a Tarzán, re cómoda yo. Ni bien terminó la pequeña se acerca y me dice: Ahora tengo hambre… bueno, vamos a comer algo, ¿y después mami? A casa, hija… ¿y después? Veamos tele, amor. ¿ el papá? No está, está de ensayo… ¿puedo dormir con vos? No, no y no (y la emberrinchada esta vez soy yo) Llegamos a casa… ¿que vamos a cenar? Ahí al toquecito y habían merendado hace media hora… Ya les preparo, si? Prendo la compu. Mientras tanto…. No… mami, yo quiero la compu, tengo que jugar, voy e intento prender el tele y ya estaba taladrando el ambiente el Disney Channel (¿cuanto falta para que terminen las vacas? me cuestiono ahora yo) Les hago puré con salchichas, me esmeré. Sirvo los dos platos iguales… proporciones idénticas, salchichas medidas por la misma escuadra y el bebé se abalanza sobre el plato de ella, en la avalancha vuelca el vaso, se mancha la ropa con puré y ella le grita. ¿Que divinos, no? Le agradezcamos al Señor la buena mesa. El bebi, al minuto de encremarse con el puré, baja el plato al piso y se solidariza con el salchicha (no las Hammond, sino el perro) El salchicha bachicha feliz, pero mi niño se arrepiente al minuto. Me parece que se me pasó la parada… ¡Paren el mundo que me quiero bajar!!!!
La nena me recuerda que quiere estrenar su bufanda fucsia en el concierto del Negro Rada… Si, ya estoy a punto de terminarla le digo… me faltan los flequitos… Ellos se sientan a la compu. Y ella le explica un juego de Cartoon Network al pequeñín. El asiente y le entiende más que cuando le digo: a dormir…. Me siento a cortar los flecos, corto uno y el bebito de mi alma se da vuelta y me dice: pan (claro, si le cediste la comida al cuadrúpedo, como no vas a tener hambre) Le doy… Ella, para no ser menos, espera que me siente, corte otro fleco y dice: pan. Le alcanzo. Sin mirar, me lo devuelve: ¡caliente!… Lo caliento, le doy, apunto para sentarme de nuevo pero ya se le acabó el pan a él y me dice: Pan…. Y ella reclama: el comió dos veces y yo una (ahora sí le funcionaron los cálculos)
Suena el teléfono y es papá que dice: ¿querrá ir mañana a lo de Guadalupe a pasar la mañana? Y ella dice: ¿pero mañana no vamos al teatro??? Claro, como se va a perder semejante evento, para el cuál la mami le está terminando su estola fucsia… Si, amor, vas a ir igual, es sólo un rato que te invita Guada… en fin, lo más seguro es que apenas se pose en el asiento del San Martín pregunte si falta mucho para que termine, que tiene hambre, que Enzo la mordió, que hace frío, que hace calor, que tiene sed y quiere ir al baño…. Pero así es la vida, no??? También el bebé habrá retenido su caca hasta el momento de entrar al teatro donde se relaja y todos te miran como si trajeras algo bajo el zapato y entonces corrés a cambiarlo al baño más incómodo del continente, levantará un caramelo del piso para comérselo, correrá hasta perderse, morderá a la hermana y a las que se le parezcan, y caerá rendido a dormir en nuestros brazos cinco minutos antes de que termine la obra, no sin antes asustarse del dulce e inofensivo Negro Rada…
¿Y nosotros? Bien, gracias. De vacaciones… ¿de vacaciones????

21.4.06

TODO POR UN SUEÑO


Kaled Pan es mi amigo, y lo admiro. No sé si será el mejor cantante, el mejor compositor o artista o el mejor amigo. Es él, y eso vale mucho. KP tiene en su mochila una serie de anécdotas para la posteridad (también lleva allí muchas teorías, viajes relámpago Córdoba- Buenos Aires y viceversa y charlas interminables pizza o lomitos mediante) pero saben que es lo más atractivo? Que tiene sueños que no lo dejan dormir, sueños que lo impulsan a estar muy alerta, a transportarse, a seguir ..... El que sueña, siempre sueña volar, dice KP con su voz armoniosa... KP merece ser escuchado, de verdad se los digo, no se van a arrepentir (y si pudieran contar con su amistad, para que les cuento) www.kaledpan.com.ar

18.4.06

A VECES NO LO VEO

Ñu ñu


Esos picos que sobresalen como pechos de mujer deben su nombre a eso justamente. Inspirados en la anatomía sobresaliente femenina, los aborígenes de la zona de Traslasierra le pusieron ñu ñu a los picos montañosos que ven en la foto. De ahí pasó a ser Nono, un inevitable mojón en nuestra geografía. Por allí estuvimos, por delante corre un río para caminar descalzos por la playita y hacer sapito en las aguas. Así pasamos los días: entre amigos, buscando niños que se resistían a regresar a las cabañas por el todo el camping, tratando de leer, de tomar un par de mates, riendo bastante y soñando con vivir algún día en un lugar así...

14.4.06

Chau, hasta mañana


Después de una semana a full de laburo, niños y postas con mi marido, llegó el deseado finde en Nono, una localidad de Traslasierra muy típica, serrana y cuna de Sumo y Las Pelotas. Allá vamos en la noche de viernes al encuentro de asados, caminatas, mates y amigos. Preparar el asunto no fue cosa ágil, es más, cuando termino, me dan ganas soberanas de quedarme en casa... Pero una vez en marcha, que lindo!!! El equipaje incluye a los niños, obviamente, sus juguetes, algo de vajilla, abrigo, desabrigo, libro y apuntes por mi parte (que pretenciosa!!!!) nada de cosméticos y muchos cds. Tal vez haya guitarra también. Muchas espectativas para dos días, no? Ojalá que al menos, juguemos una casita robada completa....

13.4.06

UN PAR DE GEMAS


Con la María tuvimos una época de culo y calzón: delirios, castillos aéreos y charlas cibernéticas. María comparte conmigo mi signo pero no mi esencia, ella es rubia, yo morocha, ella es nómada y yo sedentaria. Ella es esencialmente libre y yo no. Mientras yo me ato a lugares, personas, imágenes, la María se desata. A ella le gustaban los deportes de riesgo (esquiar! en mi vida se me ocurriría!) tomar sol e irse a lugares lejos. Allí está ahora, lejos. Ya no tenemos comunicación. Pero cómo me acuerdo de la María, de cuando chateábamos a dúo con los estimulantes nicks de Débora y Dora, de cuando salíamos a un pub y a otro y a otro. De cuando venía con la idea de tener un perro, unas tumbadoras o un auto. Ay María! A veces te extraño. Pero tengo un par de gemas que un día me diste y dentro de todo tu universo, en las gemas te tengo a vos...

12.4.06

Don´t give up (Peter Gabriel)


"In this proud land we grew up strong
We were wanted all along.
I was taught to fight, taught to win.
I never thought I could fail.
No fight left or so it seems.
I am a man whose dreams have all deserted.
I've changed my face, I've changed my name.
But no one wants you when you lose"

(En esta tierra orgullosa crecimos fuertes.
Eramos queridos todo el tiempo.
Me enseñaron a luchar, me enseñaron a ganar.
Nunca pensé que podría fallar.
No quedan luchas o eso parece.
Soy un hombre cuyos sueños lo han abandonado.
He cambiado mi rostro, he cambiado mi nombre.
Pero nadie te quiere cuando pierdes.)

Difìcil no deprimirse cuando uno piensa en el futuro... de nuestros hijos... Creo que en ese punto vale la creatividad, la belleza que puedas imprimir en su educación y las ganas de seguir, aún sabiendo que es cierto, la vida no es tan bella...
(don´t give up, you still have friends...)

9.4.06

Lo viví en mis embarazos


Me propongo relatar, resumido, lo vivido por mí durante las nueve últimas lunas.
Desmitificar -porqué no- que detrás de esa figura sinuosa, aparentemente distraída y feliz, se encuentra un paciente crónico, con horas de insomnio, acidez constante, dolores varios y cansancio permanente.
Esto me hace recordar a mi prima estrenando su nueva nariz luego de desembolsar no se cuantos dólares y sufrir los mas atroces martillazos. Ya de nuevo en la calle y recuperada, el primer piropo que recibió fue: Que hermosa naricita!!! Nos miramos y nos reímos, si supieras... pensamos las dos, por las que tuve que pasar!!!!
Con el embarazo pasa más o menos lo mismo. No hay una época en tu vida en la que no recibes mas piropos: de hombres, mujeres, ancianas y adolescentes. Y hasta están los que se atreven a decirte lo bien que te quedan los kilos de más o te frotan la panza como a un buda... La procesión va por dentro, amigas, y muchas de ustedes lo saben.
El primer tiempo un padecimiento, primero la ansiedad del estaré o no? Será un retraso? Me hago el test? Hartamos a nuestros maridos y hasta que por fin, accedemos... Mientras nos hacemos el test, ya tenemos la primer náusea y pensamos que es el pantagruélico desayuno que nos propinamos. Pero no... al minuto empiezan a pintarse las dos rayitas... Y ahí nomás tenemos la segundo náusea y el primer mareo. Y nos proponemos, de paso, dejar de tomar cerveza, comer menos y pedir turno con el obstetra. A eso le sumamos la angustia de haber comido tanto en el desayuno...
Vamos al obstetra, nos ordenan los análisis de rutina, la primera ecografía y la consabida advertencia de esperar hasta el tercer mes para dar la noticia. Pero: a nosotras nos piden discreción? Primero porque queremos gozar de los privilegios de toda embarazada y segundo porque no somos nada discretas, salimos del consultorio con la sonrisa de oreja a oreja (según el caso) y apenas vemos a nuestro marido lo abrazamos, lloramos juntos, y nos proponemos- en secreto- vengarnos de los hombres con las piernas en alto y todas las almohadas posibles solicitando los antojos mas insólitos (al fin y al cabo al bebé lo llevamos nosotros y bien que nos cuesta)
El primer trimestre pasa lento, entre las nauseas, la acidez, el asco y el ensanchamiento de cintura. Estás mas gordita?, nos preguntan. Y encima no podemos demostrar que estamos embarazadas...
Viene el segundo trimestre y si bien experimentamos un bienestar, comenzamos a comer como desaforadas y a hacerle trucos al obstetra a la hora de pisar la maldita balanza. Sacarnos las botas, usar hasta el corpiño más liviano y comer el último bocado solo media hora antes de entrar a la consulta. Pero no, no surte efecto, nos llevamos un buen reto y un consejo: no comas nada que empiece con P (postres, pastas, pan, papas) y uno piensa que?????? Entonces no tengo que comer nada de nada, tampoco pollo, puerros, pescado, (jejeje). Así se nos pasa los segundos tres meses, con la ansiedad (se agrega otra ansiedad a la lista) de saber el sexo del bebé, tratar de dormir porque después no se puede y caminar lo máximo que puedas (caminar en el shopping porque si te toca el embarazo en verano encontraras la excusa de que llueve mucho y si es en invierno, que hay viento y hace frío)
Llegado el tercer trimestre, se viene el huracán otra vez. Ya estamos pesadas y arrepentidas de todo lo que deglutimos empezando con p, b, d, d y todo el abecedario. Cansadas porque el bebé te dejó con los glóbulos rojos bajos, las defensas por el piso y además te hace sentir su vitalidad en todo momento. Duermes cuando puedes y cuanto puedes, son más las almohadas que nos apuntalan que la cantidad de horas que logras mantener un sueño continuo. La necesidad de orinar te hace de veras envidiar el pene de los hombres pero por el solo hecho de tenerlo tan largo para que llegue solito al baño. No te puedes agachar sin sentir de nuevo la maldita acidez, te dicen que comas cítricos para combatir el estreñimiento y te dicen que no los comas si tienes acidez. Tienes menos reflejos que un boxeador viejo, tienes cada vez mas hambre y cada vez te entra menos en ese estomago comprimido y encima estas estresada, esperas para cualquier momento!!!!! Y todos te lo recuerdan a cada instante no vaya a ser cosa que te olvides!!!! Si tienes cesárea programada, piensas, no hay drama, ese día hasta voy a ir a la peluquería pero el doctor te dice, ojo, en cualquier momento se puede desencadenar el parto igual. Entonces te pasas, el ultimo mes, tratando de buscar signos que denoten un parto inminente. Haces y deshaces el bolso mil veces, armas los conjuntitos, los desarmas, los arrugas y los planchas otra vez. Vas al baño y ves tu ropa interior húmeda y piensas: liquido amnioticooooooo?????? O me oriné un poco cuando estaba viendo La Niñera?????? Todo te molesta y a la vez te das cuenta que quieres ser el centro de todo, mostrar como se mueve el bebé, sus cositas nuevas, su nombre , todo eso que cabe en el universo de una mamá y te das cuenta que no todos están interesados, que pena, no saben lo que se pierden. También, con panza a cuestas, se te ocurre por luchar por los derechos de todas las embarazadas del mundo: a) comer lo que se les canta y solo cosas ricas
b) ser atendidas inmediatamente en todos lados
c) no padecer dolores ni malestares
d) que el niño nazca bien y fuerte y que se te quiten los malos pensamientos de la cabeza.
A propósito, en el supermercado padece una situación extraña, la única cola exclusiva para embarazada también incluía el cartel de SOLO HASTA 10 PRODUCTOS. Pero, donde se ha visto? Si con los pañales, los sonajeros, baberos, jabones del bebé, sumados al helado, las galletitas, gaseosas y demás alimentos calóricos , supero los 10 productos en 10 minutos?Después de todo dedico estas líneas al padecimiento normal de toda panzona, que dentro de todo, sabemos con orgullo que solo las mujeres podremos vivirlo (con infinita felicidad) y soportarlo estoicamente. La vida es una sola, a gozarla (aún estando embarazada!!!!!!)

Cambios

De como mi atavío informal se transformó en algo cómodo. Como cambié noches de enfieste y placer por mamaderas, insomnio y películas en video en volumen apenas audible.
Mis autores favoritos, mis películas de culto, mis cds extraños se convirtieron en libros de instrucción para ser padres, en dibujos animados y canciones infantiles.
Pero todo pasará, algún día pasará, la vida pasa así y trato de disfrutar de estos momentos que son maravillosos también...