10.7.08

LA FINITUD

Pienso que sé, precisamente, cuando me di cuenta de la finitud. Creo que se toma conciencia alrededor de los 6 años, conciencia de la muerte, de la separación, del nunca jamás. Yo tenía esa edad, mi papá trabajaba en el ferrocarril, entraba a las 5 y media de la mañana y volvía a las 2 y media de la tarde, almorzaba y se acostaba una siesta para luego completar el día a bordo de su taxi. Nunca oí cuando salía de casa en su bicicleta azul, invierno o verano. Pero sí tengo la conciencia de esperarlo ansiosa con el corazón palpitando cerca de la garganta. Se escuchaba, a las 2 y cuarto, una pitada de un tren que marcaba su hora de salida y hasta que no escuchaba rodar la bicicleta en el patio, no me volvía el alma al cuerpo. Cómo me he guardado ese miedo a que se muriera, como lo he sufrido. Como lo he ocultado temiendo que se hiciera realidad. Cuántas veces lo abracé exagerada cuando llegaba hasta calmar mi ansiedad, lo miraba comer, le robaba un trago de vino con soda y veíamos "Dimensión desconocida" con mi primo Javier mientras mi mamá le preguntaba por "novedades". Además aprendía, sin poder evitarlo y sin censuras, a cerca de la finitud sin comentarlo con nadie.

7 comentarios:

Silvana dijo...

No tengo conciencia de haber tenido miedo a que se muriera alguien querido a esa edad. Mi abuelo falleció cuando yo tenía 5 años, pero eso no me generó ese miedo que vos describís (por suerte). Ese miedo me asalta ahora (después de la pérdida de mi novio en un accidente, cuando yo tenía 23). Esa fue la plena conciencia de "a todos nos puede pasar", y el comienzo de ese nudo en el estómago cada vez que alguien se demora, o escucho ambulancias, o suena el teléfono a deshora.

Star dijo...

yo tome conciencia a los 10 años, con el fallecimiento de mi abuelo, en casa, un sábado.
la noticia fue tan dura y fuerte (aunque en cierta manera lo veia venir, siempre la esperanza de la mejora está) que recuerdo ese día como si fuera ayer... y todavía me causa el mismo dolor..

Anónimo dijo...

Visitá: http://gaymente.com/

Anónimo dijo...

YO ACABO DE TOMAR CONCIENCIA HACE POCO...MURIO MI PAPA...
ME SOLTO DE LA MANO,ESO SIENTO

Laura dijo...

De la finitud yo tomé conciencia a los 16, cuando se murió trágicamente el hermano de mi mejor amiga. Yo quería abrazar a todos los míos y quedarme así, sin que nadie se moviera, se fuera, viajara...
Pero hay una cosa de la que tomé conciencia muy temprano: los problemas de los grandes. Yo habré tenido 5 ó 6 años, y veía a mi papá preocupado, con muchos problemas (que vaya a saber qué habrán sido) y yo me dije a mí misma: qué suerte que tengo yo, no tengo esos problemas. Me parece que ahí entendí la dicha de la infancia.

Maisa dijo...

Recuerdo que Fernando Savater, filósofo español, describe la sensación de "la propia muerte". Porque primero somos concientes de que los de`más pueden irse para siempre, y después llega lo peor: Peo yo también me voy a ir para siempre alguna vez, YO!!!
Me acuerdo de esas sensaciones siendo una niña. Aunque todavía, a veces, me invade la misma angustia...
Un beso!

Anónimo dijo...

Uy Ross, leo ese post y me retrotrae a mi infancia, tal cual. Mi viejo era viajante y faltabade casa por varios días, y cuando llovía o había viento yo lloraba mirando la ventana y pensando dónde estaría. Cuando volvía lo apretujaba tanto!! Hasta hoy me pasa lo mismo, de no estar tranquila hasta no saber dónde anda o si ya llegó a casa. Es una sensación muy fea.