28.11.10

FAMILIA RODANTE ll

Llegamos al lugar alternativo y de paso transitorio con tres colchones, una heladera, unos trastos, dos perros y dos hijos. En dos semanas el capital se ha incrementado de manera vertiginosa ¿Cómo no vamos a poner cortinas? Traete el radiograbador y la tele (aire) y la notebook (jukebox). Ya me llevé la cámara y las cremas. Ahora mesas y sillas que servirán para el patio, sí. 
Deambulo por el departamento y "no me hallo", diferente a los niños, que se hallan como locos haciendo amigos y moviéndose a sus anchas con tanto espacio "en común" libre. Ahora el pequeño está con fiebre y yo con los pelos de punta. Una línea me pone los pelos de punta. Y él dice: no me duele má, tengo sueño. Y lo huelo, lo beso en la frente, le cambio las camisetas, en fin, lo amo.
Mi hija, mientras tanto, ha hecho abandono de hogar con consentimiento. Me ha dicho que se hará un tatuaje cuando sea mayor (¿mayor que yo?) y que su cuerpo es su cuerpo. Cumplió once y pidió un strapless. Y le queda divino con sus zapatillas negras. Ya me mira desafiante, ya me amenaza si le digo que voy a contar algo suyo en el blog. Ahora tengo filtro. Igual la amo.

1 comentario:

Mara dijo...

Transitorio por cuanto más?
A nosotros nos queda un mes más, mínimo, en tránsito!
Estoy al borde del borda!